Al loro, que es de oro.

Ya todos sabemos, bueno los del Ayuntamiento Botellín se han enterado recientemente y la Seña candidata del PP no se entera mucho de esto (poner Esperanza Aguirre + Cambio Climático o contaminación,  en google y veréis).

Decía, que ya sabemos la influencia que la contaminación atmosférica tiene sobre las enfermedades cardiovasculares, respiratorias y otras zarandajas de esas que se nos llevan para el otro barrio en un abrir y cerrar de válvula mitral (2.000 muertes al año en Madrid).

Ahora resulta que la Universidad Johns Hopkins y la Escuela de Salud Pública de Harvard (EE.UU.) (http://www.madrimasd.org/informacionidi/noticias/noticia.asp?id=63274&origen=notiweb&dia_suplemento=miercoles ) han hecho un estudio que  alerta sobre la repercusión de la contaminación y sobre todo de las partículas PM 2,5 (la cochambre más pequeña que sueltan los gasoil, para entendernos) en la ansiedad.

 

Yo pensando que esa desazón que se me pone en el estómago sobre el día 25, era por la VISA y la falta de liquidez en la cuenta del banco y resulta que es por la contaminación. Cachis.

Dice el estudio, que los datos no son concluyentes, pero vaya, que tienen una pinta de ser verdad que asustan. Y eso que ellos no viven en Madrid y no tienen a Botellita de Alcaldesa. 

Yo de momento ya estoy pensando en terminar las sesiones de sicoanálisis y comprarme una máscara antigás. No sé si será más efectiva, pero más barata seguro.

Mientras tanto nos queda poco para desESPERANZARNOS, que digo yo que si ¿no?.