La Educación, el compromiso y la juventud.

Esta semana es la semana de la Educación.

Salen las notas de selectividad. Salen las notas de todos los ministros, expresidentes y demás gente importante por un comentario del Ministro “indeseable”. Un Ministro al que no quitan porque hace buenos a los demás y eso siempre es un punto a favor.

Que Wert es un “metepatas” no es nada nuevo. Lo hace a propósito, tampoco cabe ninguna duda. Ahora resulta que la igualdad de oportunidades está en el 6’5 y de ahí hasta el 5 es fracaso. Si eso fuera así este país estaría sin gobierno desde hace más o menos 8 años, casi desde que Zapatero se trajo a las tropas de Irak vaya.

Sin embargo hay dos noticias que me han dado esperanza, quizás tres, pero la última habrá que verla con más detenimiento.

La primera es que el hijo de mi amiga Laura, Anatolio, ha sacado la nota más alta, no en la selectividad, que también, sino en compromiso, en conciencia y en saber usar los medios de comunicación para transmitir un mensaje.

Su camiseta verde, sus palabras claras y rotundas en apoyo a la Educación pública. Como explica su desprecio por el bachiller de excelencia, que será excelente, pero también clasista y excluyente.

Enhorabuena a todos, a él, a sus amigos, a su familia y a todos los que creemos que los jóvenes no son ni tan “pasotas” ni tan estúpidos.

En la misma línea veo hoy en el diario, antes progresista y ahora vete tú a saber,  El País, que entregan los premios “El País de los Estudiantes”, lo primero que me sorprende es que la foto de grupo, tomada desde el aire, el color que más destaca es el de la marea verde.

Bien por estos chicos que no olvidan, que saben muy bien donde y cuando es importante ponerse la camiseta.

Luego me fijo en las fotos de los distintos colegios y me vuelve a llamar la atención la uniformidad de los ganadores, el Instituto Miguel Herrero Pereda de Torrelavega (Cantabria) y pienso rápidamente en los “pp escolapios que nos llevaron de excursión”, pero no, la camiseta roja con letras blancas dice “Sniace en lucha”. De nuevo compromiso, educación y atención, mucha atención por el momento adecuado.

Me acuerdo de ayer cuando una responsable de la OCDE dio a conocer otro de sus muy sesgados informes, este sobre educación que hablaba de la generación “nin” y me pregunto sino no será otra de esas estrategias para desconectar a unos jóvenes que formaron y forman el grueso de los indignados del 15M y las mareas, de la sociedad adulta que esperamos a que los jóvenes cambien las cosas, pero ni las cambiamos nosotros que somos los que realmente podemos, ni les aceptamos cuando las intentan cambiar.

La última noticia esperanzadora, pero con sordina, es la propuesta del Presidente Obama, más Presidente Norteamericano que nunca con sus espías, sus guerras frías y sus amenazas exteriores, pero que ayer propuso hacer de su país un país más limpio y menos dañino para el planeta, al menos en lo que a emisiones de CO2 se trata.

Veremos en que se concreta, porque se empieza anunciando recortes de emisiones y se termina aprobando prospecciones petrolíferas en Alaska o nuevos pozos fracking.

De momento lo que si indigna es que la apuesta sea por las renovables, que el modelo sea la España de hace 3, 4 años y que nuestro gobierno se empeñe en no darse cuenta de que el futuro no está en el petróleo, el carbón y mucho menos en las nucleares, que es lo que parece lo que intentan primar desprimando las energías renovables. Y todo porque el lobby eléctrico es fuerte y formado por importantes "personajes". Cuando primara el interés general  y no el particular.

Me entero también hoy de que vamos a construirle un aeropuerto a Aldesón para su Eurovegas. Verás cómo nos gastamos la pasta y luego este tío se la lleva a Las Vegas. Verás cómo al final pagamos el pato los de siempre. 

Propongo que se reforme la Ley para que los proyectos de las 

administraciones que por sentencia judicial o por evidencia económica resulten ruinosos para las arcas públicas sean pagados por el bolsillo de los que las propusieron y aprobaron.